El uso de alargaderas en la soldadura

Una mayoría de veces, cuando usamos una inverter para soldar, utilizamos también cables de alargo.

La utilización de alargaderas suele conllevar problemas de utilización en algunos casos que muchas veces se achacan a la máquina cuando en realidad se debe a la alargadera.

El peligro de trabaja con alargaderas radica en la caída de tensión que ello conlleva, en caso de que no esté el cable bien dimensionado la caída de tensión es muy importante y el equipo puede llegar a no funcionar o a funcionar de forma incorrecta (con menos rendimiento, con falta de penetración…).

Las máquinas de soldar, cómo máquina para trabajar en obra, calle, taller… ya está prevista para poder trabajar con un voltaje de entrada amplio. Las máquinas monofásicas trabajan en 230V y de forma normal con un ±10-15% de tolerancia, SOLTER tiene en esto uno de sus caracteres diferenciales, ya que nuestras máquinas tienen un amplio rango de trabajo, la gama MANTENIMIENTO trabaja entre 140 y 280V, la PROFESIONAL entre 120 y 280V y la PROFESIONAL INTENSIVO entre 120 y 310V. Esto permite a nuestros clientes trabajar en condiciones cambiantes de voltaje utilizando alargaderas y generadores.

De todas formas cuando trabajamos con una alargadera con una sección insuficiente podemos tener ciertos problemas habituales:

-      Falta de penetración: al tener un voltaje de entrada inferior a los 230V, que es lo óptimo, la máquina, a la misma potencia que la habitual, desarrolla menos potencia y no penetra en la pieza que soldamos. A veces, esta falta de potencia se compensa incrementando la potencia de trabajo, al hacer esto podemos tener problemas de rendimiento de la máquina.

-      Paro por sobrecalentamiento del cable: aunque la máquina nos marque el fallo por calentamiento, no es así, se trata de un fallo de tensión, provocado por un sobrecalentamiento de la alargadera. Si la alargadera mal dimensionada nos aguanta el empezar a trabajar, puede pasar que con el aumento de temperatura derivado del trabajo se caliente y haga caer la tensión recibida por la máquina por debajo de los márgenes tolerables.

La solución es fácil, debemos dimensionar bien las alargaderas. No obstante, para trabajar con alargaderas y con plenas prestaciones de las máquinas muchas veces deberemos usar cables de un diámetro considerable, por ejemplo para una máquina de 200 amperios y 50 metros de cable deberíamos ir a un mínimo de un cable de 3x4mm y sería recomendable utilizar uno de 3x6mm.

Hay que tener en cuenta 2 parámetros a la hora de dimensionar bien las alargaderas: la potencia de la máquina y la longitud del cable.

A más longitud, mayor sección y a mayor potencia mayor sección.

Esto significa que puede darse el caso que un equipo de 130 amperios funcione en un cable y uno de 200 amperios no funcione.

Debemos tener siempre en cuenta, además, que si utilizamos alargaderas enrolladas, debemos sacarlas siempre (al 100%) del tambor, no hacer esto sería peligroso ya que nos crearía una caída de tensión muy importante y además corremos el riesgo de quemar el cable.

Os dejo con un cuadro de utilización de alargaderas:

	Sección alargadera en mm2
POTENCIA EQUIPO	10 metros	25 metros	50 metros
80-100A	3x2,5mm	3x2,5mm	3x4mm
130-160A	3x2,5mm	3x4mm	3x4mm
160-180A	3x2,5mm	3x4mm	3x6mm
180-200A	3x4mm	3x6mm	3x6mm